Estos momentos deberían ser los más dulces de un profesional del sector inmobiliario. Igual que lo es para un médico cuando tiene muchos pacientes a los que curar... lo mismo debería sucederle al verdadero profesional inmobiliario.
Ahora es cuando hay que demostrar. Ahora es cuando nos necesitan los clientes. Ahora es el momento de justificar nuestra profesión. Si no, ¿para qué? si los propietarios pueden también comprar, ¿para qué nos necesitarían entonces?
Los verdaderos profesionales se formarán, se reciclarán, es decir, se prepararán para este cambio de ciclo, y tendrán soluciones para sus clientes. No abandonarán.
En estos momentos de incertidumbre es cuando más nos necesitan y hay que demostrar lo que valemos y para qué estamos. Ya es hora de trabajar. Y ayudar a nuestros clientes a que sus sueños se hagan realidad.
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